Sinónimos de manar

¿Cómo ha de actuar mi corazón? ¿Acaso en vano venimos a vivir, a brotar sobre la tierra?

Haremos brotar la vida, desde esta muerte que nos sirven en la mesa, en sus hospitales, escuelas, universidades; nuestro cielo está estrellado y todas están de pie listos para rendir el examen de la historia.

Para que pueda surgir lo posible es preciso intentar una y otra vez lo imposible.

El tiempo hace surgir nuevos escollos, cuya existencia nunca creímos posible; no hay que considerar segura la victoria hasta que el combate no haya tocado a su fin.

No hay reglas ni regulaciones para la composición perfecta. Si hubiera sería posible poner toda la información en un ordenador y salir con una obra maestra. Sabemos que es imposible.

Cuando uno escribe hasta convertir la escritura en un vicio, lo único que hace es explorar. Y para encontrar algo hay que ir hasta el fondo. Lo peor es que, una vez en el fondo, es imposible regresar a la superficie. No se puede salir jamás.

Tenemos todo en nuestro país, el más hermoso del mundo, gracias a Dios por darnos el privilegio de nacer aquí

Si el alma es de inmortal naturaleza, si al nacer en el cuerpo se insinúa, ¿Cómo es que no podemos acordarnos de la vida pasada, ni tenemos de los antiguos hechos resto alguno?

El miedo ante la unión, ante el fluir hacia la otra parte. Entonces ya no estoy nunca más solo

No te establezcas en una forma, adáptala y construye la tuya propia, y déjala crecer, sé como el agua. Vacía tu mente, se amorfo, moldeable, como el agua. Si pones agua en una taza se convierte en la taza. Si pones agua en una botella se convierte en la botella. Si la pones en una tetera se convierte en la tetera. El agua puede fluir o puede chocar. Sé agua amigo mío.

El frío anochecer de Kyoto hacía aflorar el calor del fuego. El viento, en la penumbra, gemía entre los pilares. El grillo que se posaba en la gruesa columna había desaparecido.

Creo que esta brizna de paja puede originar una revolución. A primera vista, esta paja de arroz puede parecer ligera e insignificante. Difícilmente nadie puede creer que puede ser el origen de una revolución. Pero yo he llegado a darme cuenta del peso y el poder de esta paja. Para mí esta revolución es muy real.

La obra en que el Señor se ha complacido en utilizar nuestras humildes aptitudes ha consistido en reconstruir, ajustar y armonizar, más bien que en originar

¡Que ninguna de las mejoras sociales conseguidas por los obreros queden sobre el papel sin surtir efectos, y se conviertan en realidad!

Hacer reír, llorar y reír nuevamente, la gente va al teatro para realizar un ejercicio emocional y no para recibir una prédica.

Mis ojos vueltos a la sombra infinita, aprendieron a llorar por lo más hondo del corazón y de la vida, por lo que nunca se ha visto, ni se verá, y por lo que ya no volveremos a ver jamás.