Sinónimos de aureola

¿Qué pena, qué castigo habrá que cuadre a éste, de los hombres monstruo fiero, temerario homicida de su padre, aunque de su corona el heredero?

Yo Don José I por la gracia de Dios, Inca, Rey del Perú. Por cuanto es acordado en mi Consejo por junta prolija por repetidas ocasiones, ya pública, que los Reyes de Castilla me han tenido usurpada la corona y dominio de mis gentes, cerca de tres siglos

Dame tus sueños para hacerte una diadema

Era tu figura la flor de un nimbo de ensueño.

El halo de la luna. ¿No es el perfume de la flor del ciruelo que subió hasta allá?

Todo el que ha conocido algún gran hombre se ha sorprendido de hallar que su alma poseía un halo de puerilidad.

El amor es el calor de la luz del Ser. Por eso el amor lo abarca todo. El amor es el calor y el resplandor de la Unidad. El amor es la esencia de la Unidad.

Tu dulzura como acto. O resplandor que ata la memoria, salva de los raspajes de la noche.

Si los que vienen alimentaran su nostalgia con una buena postal, al menos, del paseo nosotros seriamos capaces de recibirlos aquí en gloria y majestad pero ellos tienen su tambor y nosotros el nuestro.

Yo no pretendo tener ni barco ni aviones como otros artistas, mi gloria es estar con amigos

A la opinión y fama démosles su lugar debido

La fama suele alcanzar a aquellos que están pensando en otra cosa.

El renombre y el reposo no compaginan.

Los sabios de mayor renombre caminaron en las tinieblas de la ignorancia; fueron, sin embargo, las lumbreras de su tiempo.

En realidad, lo que para la mayoría de la gente de nuestra cultura equivale a digno de ser amado es, en esencia, una mezcla de popularidad y sex-appeal.

La mayor parte de las gentes no juzgan a los hombres más que por su popularidad o por su fortuna

Desconozco si Dios existe, pero sería mejor para su reputación que no existiera.

Muchas personas cuidan su reputación y no cuidan su conciencia

La humanidad debe gran parte de sus desastres al primero que cercó un terreno y dijo: «Esto es mío».

De Gasperi cercò sempre il confronto e il dialogo con tutti, dimostrando di non aver paura di affrontare i cambiamenti. Questo è stato il suo grande insegnamento che è valido ancora oggi.

¿Acaso no existe en mi cuerpo una especie de limbo de la memoria donde todos los recuerdos cruciales van acumulándose y convirtiéndose en lodo?

Existió sin existir en ese limbo entre la vida y la muerte que es el purgatorio de los locos.