Sinónimos de filamento

Empiezo a desear un lenguaje parco como el que usan los amantes, palabras rotas, palabras quebradas, como el roce de las pisadas en la acera, palabras de una sílaba como las que usan los niños cuando entran en un cuarto donde su madre está cosiendo y cogen del suelo una hebra de lana blanca, una pluma, o un retal de chintz. Necesito un aullido, un grito.

A los niños nadie les enseña algunas cosas indispensables, como arreglar una llave que gotea, sobornar a un funcionario o cortarle el pelo al perro.

Espero que la gente vea que hay un cerebro bajo el pelo y un corazón bajo las tetas

Creo que esta brizna de paja puede originar una revolución. A primera vista, esta paja de arroz puede parecer ligera e insignificante. Difícilmente nadie puede creer que puede ser el origen de una revolución. Pero yo he llegado a darme cuenta del peso y el poder de esta paja. Para mí esta revolución es muy real.

Podremos saber que nada vale más que la brizna roída por un conejo o la ortiga creciendo entre las grietas de los muros. Pero nunca dejaremos de correr para acompañar a los niños a saludar el paso de los trenes.

Es mucho mejor coger uno de tus auriculares y ponerlo en su oreja... entonces estaréis conectados por sólo unos 60 cm de cable

El canal de cable Todo Noticias es, como dicen unos amigos: Todo Negativo

El mundo no es sino una gran telaraña, y basta con tocar un hilo para que los demás vibren.

La imaginación no caza en jaurías: para imaginar eficazmente, el niño necesita la soledad mental absoluta; saber que únicamente entre las páginas del libro, si tiene suerte y si el libro lo interpela, descubrirá por sí mismo el hilo de una historia secreta contada únicamente para él. A esa singular lección aspira toda la literatura.

Las personas dicen que la felicidad es reírse todo el tiempo y disfrutar de una buena chuleta o de un filete de ternera e irse a gusto a la cama, ganar un juego y cosas así. Esto es estúpido. No hay nada de eso. Se necesita un contraste. No lo disfrutas. Eso no es la vida. La vida es: hincarle el diente, tomarla absolutamente tal como es.

Una mujer virtuosa tiene en el corazón una fibra de menos o una de más que las otras mujeres: o es estúpida o es sublime.

Cuando uno escribe para satisfacer la inspiración interior del alma, uno da a conocer por lo escrito, aun sin quererlo, hasta la más mínima fibra de su ser y de su pensamiento.