Sinónimos de denuesto

Más vale apagar una injuria que apagar un incendio.

La ira, si no es refrenada, es frecuentemente más dañina para nosotros que la injuria que la provoca.

...el príncipe no debe preocuparse de incurrir en la infamia de aquellos vicios sin los cuales difícilmente podría salvar el estado...

Ama y aprecia a la mujer y no abuses nunca de su debilidad, sería una infamia y una cobardía.

Y ante éstas me he cuestionado si alguien se puede ganar que otro le niegue el derecho de volver a respirar. De que lo priven de todo, su futuro y sus recuerdos, por la ofensa imperdonable de que no vive de acuerdo.

Toda infracción de la ley es una ofensa contra el Estado.

...; en la guerra, para vengar la afrenta de unos pocos y a veces de uno solo, afligimos cruelmente a tantos miles de hombres que no se lo merecen.

Se indignaron con la afrenta y se sublevaron ante nuestra fuerza corriendo a las armas. Los españoles en masa se condujeron como un hombre de honor

Viendo la televisión de Chaves, la catalana o la ETB, decir que Telemadrid manipula más es un insulto a la inteligencia

¡Cuántas veces los signos de poder ostentados por los potentes de este mundo son un insulto a la verdad, a la justicia y a la dignidad del hombre! Cuántas veces sus ceremonias y sus palabras grandilocuentes, en realidad, no son más que mentiras pomposas, una caricatura de la tarea a la que se deben por su oficio, el de ponerse al servicio del bien.

Las heridas de la calumnia se cierran pero quedan las cicatrices.

Si murmurar la verdad aún puede ser la justicia de los débiles, la calumnia no puede ser otra cosa que la venganza de los cobardes.

Menos agravio se hace al que presto se niega lo que pide.

Las tres cosas más difíciles en este mundo son: guardar un secreto, perdonar un agravio y provechar el tiempo.

No añadas el ultraje a la infidelidad.

El carácter consiste ante todo en no dar importancia al ultraje o al abandono de quienes están con nosotros.

El esclavo soporta su suerte Aunque oprobia su triste vivir, pero el libre prefiere la muerte al oprobio de tal existir.

Nunca una palabra indiscreta escapará de mis labios para comprometer a nadie. Me sobra firmeza de ánimo para arrostrar el trance final. Prefiero sin vacilar una muerte gloriosa a cubrirme de oprobio delatando a persona viviente

Pagaré con mi vida la defensa de los principios que son caros a esta Patria. Caerá un baldón sobre aquellos que han vulnerado sus compromisos, faltando a su palabra... rota la doctrina de las Fuerzas Armadas

Tras ciento cincuenta años de halago a las masas sociales, sabe a blasfemia afirmar que si imaginamos ausente del mundo un puñado de personalidades escogidas, apestaría el planeta de necedad y egoísmo.

Ruego al Diablo y a su más alto dignatario acojan esta suerte de blasfemia como se acoge un mal, una epidemia, que acaba con esclavo y propietario.

El gobernante que pretende encauzar a su país hacia la democracia tiene que empezar por ser un verdadero demócrata, y demostrarlo tolerando la oposición, por más cruda que se ejerza en el mitin, en la prensa, en la diatriba personal

La diatriba es el pus de una úlcera del alma